Este 28 de abril se desarrolló la visita del Santo Padre a la ciudad lagunar, donde la primera parada fue en un centro penitenciario femenino, allí, escuchó fragmentos de historias y compartió palabras de esperanza con las reclusas, el personal administrativo, penitenciario y los voluntarios.
Posteriormente, se reunió con jóvenes, quienes lo recibieron con cánticos que resonaban en el muelle donde el Pontífice llegó en lancha, así pues, el Papa invitó a los presentes a no vivir sentados en el sofá y a encontrar a la gente, remando con perseverancia para llegar lejos.
Finalmente, el Sumo Pontífice llegó a la Plaza de San Marcos para la Misa conclusiva, donde detalló que la ciudad necesita de cuidados y protección, extendiendo un llamado a las autoridades y a los habitantes para que Venecia, pueda ser "un signo de belleza accesible a todos, empezando por los últimos".
Con esta visita el Santo Padre Francisco se convirtió en el cuarto Papa en estar presente en la ciudad lagunar y el primero en visitar la Bienal de Arte.